24 febrero 2007

mi "p" invertida


- señorita, tiene usted la p invertida- dice extrañado con mi electro entre las manos-
fijése, justo aquí, esta onda está al revés...
- y eso es malo, doctor?- pregunto sin entender nada
- no se preocupe, no es grave, sólo es diferente
y con mi corazón puesto en un papel vuelvo a casa preguntándome si esa p invertida será una d.
y que es verdad, que hay algo que no acaba de encajar. algún engranaje que no consigo acoplar y hace que, como stephane, a veces todo se distorsione. y sienta que necesite dormir entre nubes de algodón, perderme sóla por el centro, escribir post en la última página de un libro, ponerme gafas de colores para ver la vida en 3D.... pero sabes que? ya no siento la necesidad de salir corriendo. y, eso es bueno, no?


13 febrero 2007

ahora los comentarios también están llenos de ventajas!
gracias!!!

08 febrero 2007

planes,planes, planes

"vera faltó a la escuela. se quedó todo el dia encerrada en casa. al anochecer escribió una carta a su padre. el padre de vera estaba muy enfermo, en el hospital. ella escribió:
- te digo que te quieras, que te cuides, que te protejas, que te mimes, que te sientas, que te ames, que te disfrutes. te digo que te quiero, te cuido, te protejo, te mimo, te siento, te amo, te disfruto.
Héctor Carnevale duró unos dias más. después, con la carta de su hija bajo la almohada, se fue en el sueño."
Bocas del tiempo- E. Galeano


j esperaba, tumbado en la camilla, a las puertas del quirófano. la anestesista se acercó, y, cogiendo su mano con cariño le dijo:
- ahora intente relajarse. piense en cosas bonitas. en lo que más ilusión le haga.
él, con los ojos llenos de lágrimas, pensó en voz alta:
- en el viaje a lanzarote con mis hijas cuando salgamos de aquí...
j duró unos dias más. después, rodeado de sus hijas, viajó en el sueño.

01 febrero 2007

una tarde

a veces, como hoy, necesito regalarme una tarde.

entonces me pongo mis vaqueros con los bajos rotos (de pisarmelos) y mis zapatillas rojas. elijo un libro entre los 5 libros de supervivencia que no he metido en cajas.camino rápido hacia el metro. me gusta caminar rápido.
hemos llegado. al centro, claro. como si estuviese en una ciudad desconocida, salgo algo despistada, confusa hacia donde ir. mis pasos me llevan a esos pequeños cines al lado del parque.
entonces me acuerdo del chico de ojos grandes que me vistió en verano. tiene una pequeña tienda al final de la calle. entro y me reconoce. sonrío y me hago la despistada pasando las perchas con poca ilusión. él se dá cuenta y elige la rompa por mí. como si fuera una muñequita me trae faldas, camisas, zapatillas y abrigos. y me viste con todos mis complementos. de fondo maximilian hecker.

toda contenta me voy corriendo hacia el cine. y en la peli no está otto, sino un guardia de seguridad, una rubia y un perro.

y ya de vuelta a casa, no me hace falta sacar ni el libro del bolso, tras esta pequeña ventaja de tarde.