nunca, en ninguna frase, estarán tan cerca cómo en mi caja.
dicen, que sólo existe aquello que podemos nombrar, que aquellas cosas, personas, … que no recordamos su nombre, las acabamos por olvidar y dejan de existir.
por eso, yo tengo mucho cuidado para no perder ninguna.
cierro la caja y la meto en la mochila. pedaleando, subo la calle rápido, con la palabra valiente en la mano.
ya empieza a hacer calor. Aquí, ahora, la primavera pasa muy deprisa. no importa.
busco a david entre los miles de maratonianos que recorren hoy la ciudad. pensando en la suerte que tengo y en los dias de cambios que se avecinan. mañana empieza la semana, los lunes son buenos, o acaso conoces algún principio malo?