11 marzo 2007

un dia al mes

abre los ojos. todavía no ha sonado el despertador. por la escasa luz que se cuela entre los estores, intuye que debe faltar poco. medio a tientas todavía, coge el móvil. un mensaje que, sin terminar de leer, borra. y sin tener muy claro si es martes o jueves se desliza hacia el baño para meterse en la ducha. ya con el tazón de cereales entre las manos, echa la cuenta de cuando le tiene que venir la regla, esperando que ese sea el motivo por el cual hoy se siente tan triste. se mete en el coche y ni siquiera enciende la radio. en silencio no sabe muy bien si es ella misma la que conduce. y parada en la nacional II, piensa que no tiene sentido. luego en el trabajo, representa su papel, como en una película simplona.
a veces piensa en lo egoísta que se está volviendo. cada vez está más llena de ella misma. tanto que no cabe nadie más.

ahora escribe en su cuarto, deseando que ese disco de jack johnson no acabe nunca. Y aunque a veces le asusta la soledad, cada día la busca más. y la siente como un nuevo estado de ánimo, en cierto modo, una elección de vida.
el tlf de casa suena. dejó de cogerlo hace un año, cuando sonaba a todas horas. Llegaron a acumular hasta 80 mensajes sin escuchar. la gente se cansó de llamar. bueno, casi toda. lógico.
algunos se empeñan en “cuidarla”. pero ella no quiere. quiere estar s o l a y a veces t r i s t e. el disco llega a su final, pero le vuelve a dar al play. ojalá que todo fuese tan fácil. lo de dar al play, digo. o al pause, o retroceder una canción.y le parece buena la idea de una máquina del tiempo. que adelante o retrase un segundo. aunque la idea no sea suya. nunca ha presumido de original.