12 enero 2010

inshalla!


el viaje al sur de marruecos ha sido como un cuento berbere antes de dormir.
con historias de rinocerontes con trompa y piel arrugada,
y tortugas de arena en un espectacular día de playa.
en el desierto con noches de estrellas fugaces como yo
y trazos en la arena de dunas y dromedarios.
un cuento en palmerales infinitos
y casitas de adobe.
con el calor del hamman
y el frío de la nieve del atlas.
con desayunos de té, y pan
dentro del saco.
buscando chacales, en pistas perdidas.
con sensación de verano.
guardando(te) cada mañana la mejor de las
sonrisas.
y es que ha sido un cuento lleno de cariño.

1 comentario:

felix dijo...

uauuuuuuh! qué variedad de paisajes, transmite serenidad.